Addis Abeba, Etiopía-El sur de Etiopía se encuentra de luto tras el trágico deslizamiento de tierra que cobró la vida de al menos 146 personas, según el último reporte de las autoridades locales emitido este martes.
El desastre natural ocurrió el pasado lunes (22 de julio de 2024) en una remota región montañosa cerca de la ciudad de Arbaminch, situada a unos 400 kilómetros al sur de la capital, Addis Abeba. Los equipos de rescate, junto con voluntarios locales, continúan las labores de búsqueda entre los escombros en busca de supervivientes, aunque las esperanzas de encontrar más personas con vida disminuyen con el paso de las horas.
El primer ministro etíope, en una declaración pública, expresó sus condolencias a las familias afectadas y prometió todo el apoyo del gobierno en las operaciones de rescate y asistencia a los damnificados. Mientras tanto, se están coordinando esfuerzos para proporcionar refugio temporal, alimentos y atención médica a los sobrevivientes que han perdido sus hogares a causa de este desastre natural devastador.
Impacto devastador y consecuencias médicas
El deslizamiento de tierra ha dejado además un número significativo de heridos, muchos de ellos en estado grave, quienes están siendo atendidos en hospitales locales. La topografía montañosa de la región, combinada con las intensas lluvias de la temporada, probablemente contribuyó al desencadenamiento de este deslizamiento mortal.
Esperanza y precaución para el futuro
Las autoridades locales han instado a la población a mantener la calma y seguir las indicaciones de seguridad emitidas para prevenir riesgos adicionales en áreas vulnerables. Asimismo, se ha iniciado una evaluación de los daños a la infraestructura para determinar el impacto total del desastre en la comunidad y planificar la reconstrucción a largo plazo.
Este incidente subraya la vulnerabilidad de las zonas montañosas de Etiopía frente a fenómenos naturales como los deslizamientos de tierra durante la temporada de lluvias. Se espera que las operaciones de rescate y recuperación continúen en los próximos días, mientras el país lamenta una de las peores tragedias naturales de los últimos años en esta región.
Fuente: DW
