Colombia – La economía colombiana se enfrenta a un segundo semestre en el que la resiliencia será clave para alcanzar un crecimiento superior al 1,5%. Los resultados del Índice de Seguimiento de la Economía son claros. En julio, el índice creció un 3,7% anual. Además, el crecimiento acumulado es del 1,9% este año.
Los sectores productivos muestran un panorama mixto. Mientras la industria presenta ligeras mejoras, el comercio sigue enfrentando desafíos significativos. A pesar de que el sector servicios creció en 14 de 18 subsectores, el segmento de alojamientos aún permanece en números negativos. Según un informe de Bancolombia, se espera un leve fortalecimiento de la economía. Este crecimiento provendrá de una dinámica mixta entre los sectores público y privado.
La reducción de la tasa de interés, junto con condiciones financieras internacionales más favorables, beneficiará al sector privado. Sin embargo, el economista Diego Cortés Valencia advierte sobre los retos que enfrenta el país para mantener este crecimiento. El proceso de reducción de la tasa de interés de referencia por parte del Banco de la República es crucial para estimular la demanda de créditos, tanto para consumo como para inversión.
Retos y Oportunidades en los Sectores Productivos: Un Análisis del Panorama Económico
En cuanto a las actividades productivas, se espera que el sector agropecuario tenga un progreso notable, mientras que la minería continuará enfrentando desafíos, especialmente por los precios globales del carbón. En el ámbito de la construcción, aunque ha tenido un desempeño mejor al esperado, la baja demanda de vivienda y los altos inventarios son riesgos importantes a considerar.
El macrosector de comercio, transporte, alojamiento y comidas también muestra una dinámica mixta. La reducción de tasas de interés podría impulsar el consumo y el comercio, pero la situación del mercado laboral podría frenar la recuperación del turismo interno. Por otro lado, el sector público ha mostrado un crecimiento sólido en el primer semestre y se beneficiará de los programas de las alcaldías y gobernaciones.
En resumen, los expertos consideran que el consumo seguirá siendo un motor esencial para el crecimiento. Se espera que el consumo público crezca un 1,8% en 2024 y un 3% en 2025. A pesar de las incertidumbres sobre la capacidad de gasto del Gobierno, se anticipa que tanto el gasto público como el privado impulsarán la recuperación económica en el país.
Fuente: El Nuevo Siglo