Colombia – La Policía Nacional de Colombia, con el respaldo del Servicio Secreto de Estados Unidos, logró desmantelar una sofisticada red de falsificación de dólares que operaba en el suroccidente colombiano. Tras una exhaustiva investigación de dos años, la Dirección de Investigación Criminal (DIJIN) identificó a los miembros de esta organización. Los delincuentes movía el dinero falsificado entre los departamentos de Nariño, Valle del Cauca y Ecuador.
El primer golpe de las autoridades ocurrió en una en Nariño, donde fue capturado un individuo que transportaba 2.933.300 dólares falsos en billetes de 100 dólares. Posteriormente, en los municipios de San Juan de Pasto y Guaitarilla, las autoridades detuvieron a otros sujetos en posesión de 1.060.000 dólares en billetes falsos de 50 y 20 dólares. El operativo dejó al descubierto no solo el dinero, sino una infraestructura de falsificación de alto nivel.
Red criminal operaba con sofisticada maquinaria
La Policía incautó en los allanamientos una máquina litográfica industrial, 39 planchas de billetes de 50 y 20 dólares, impresoras y otros insumos clave. Según las autoridades, la organización criminal operaba con una estructura bien definida y jerárquica. Sus miembros estaban especializados en diversas etapas, desde la adquisición de maquinaria hasta la distribución final del dinero falsificado.
El cabecilla de la operación, conocido como alias Óscar, permanece prófugo de la justicia. Óscar, junto a Palomo, lideraba la logística y ajustaba los equipos usados para imprimir los billetes falsos. Mosca y Arturo coordinaban el transporte de insumos y dinero falsificado. Utilizaban taxis y vehículos particulares para trasladar el material entre las sedes de producción en Colombia y los puntos de entrega en Ecuador.
La red, conocida como “Los Veteranos”, ubicaba sus sedes de producción en áreas rurales, lo que les permitía evitar la detección policial. Para mayor seguridad, grupos armados protegían estos inmuebles, dificultando el acceso de las autoridades, especialmente en las primeras etapas de la investigación.
Tras los operativos, las autoridades judiciales presentaron a los detenidos y les imputaron cargos por falsificación de moneda nacional y extranjera, tráfico de moneda falsa y concierto para delinquir. Esta operación representa un avance importante en la lucha contra el crimen organizado transnacional, un fenómeno que afecta significativamente la economía de la región.
Fuente: Semana