Un proceso judicial complicado
Aunque la decisión de Gascón es un paso significativo, el camino hacia la libertad de los Menéndez es largo. Primero, un juez deberá aceptar la recomendación del fiscal, quien argumenta que, dada la nueva comprensión del trauma asociado al abuso sexual, es apropiado reconsiderar las sentencias. Si el juez acepta, una junta de libertad condicional evaluará su caso y, finalmente, el gobernador de California, Gavin Newsom, tendrá la última palabra. Este proceso puede tardar meses y está marcado por la incertidumbre.
Los hermanos admitieron haber matado a tiros a sus padres, alegando que temían por sus vidas debido al abuso sexual que Erik había sufrido a manos de su padre, José Menéndez. Sin embargo, en el juicio original, la defensa del abuso fue desestimada, lo que llevó a una condena que muchos ahora consideran injusta. La reciente atención mediática, incluyendo una serie de Netflix sobre su historia, ha reavivado el interés en el caso y la discusión sobre el trauma de los sobrevivientes de abuso.
Roy Rosselló, exmiembro del grupo Menudo, afirmó recientemente que José Menéndez lo drogó y violó cuando él era adolescente en la década de 1980. Esta declaración aparece en la docuserie de 2023 *Menéndez + Menudo: Boys Betrayed*. Además, su testimonio se incluye entre las pruebas enumeradas en la petición que el abogado de los hermanos Menéndez presentó el año pasado para solicitar una revisión de su caso.
El eco del pasado y el cambio en la percepción social
Desde su condena, los hermanos Menéndez han demostrado un comportamiento ejemplar en prisión y han manifestado su deseo de rehabilitarse. Gascón argumenta que sus esfuerzos merecen una nueva sentencia. Sin embargo, algunos fiscales expresan escepticismo ante esta decisión, alegando que Gascón utiliza el caso como una maniobra política. Michele Hanisee, presidenta de la Asociación de Fiscales Adjuntos de Los Ángeles, critica la recomendación y sugiere que Gascón prioriza la atención mediática sobre la verdadera justicia.
La familia de los Menéndez también abogan por su liberación, enfatizando que, en la actualidad, la percepción sobre el abuso y el trauma ha cambiado. Según ellos, los hermanos no habrían sido condenados de la misma manera si el caso se hubiera juzgado hoy.
¿Qué pasará ahora?
Mientras los Menéndez esperan su audiencia ante el juez, su abogado, mantiene la esperanza de que puedan ser liberados antes del Día de Acción de Gracias. Sin embargo, la comunidad legal advierte que las decisiones en casos como este son complejas. Y pueden verse afectadas por la controversia política y las divisiones internas en la oficina del fiscal.
A medida que el caso avanza, queda por ver si Lyle y Erik Menéndez finalmente podrán dejar atrás su pasado y encontrar un camino hacia la libertad.
Fuente: Telemundo