Italia – Una enfermera con más de 20 años en el hospital Perinei resultó despedida por criticar públicamente a una madre que no reconoció a su recién nacido. En su publicación en redes sociales, la enfermera calificó a la madre de “desalmada” y “cobarde”, lo que desató un fuerte debate sobre la ética profesional. Este incidente ha puesto de relieve la importancia de la comunicación responsable entre el personal sanitario y los pacientes. Además, ha provocado cuestionamientos sobre cómo deben manejar los profesionales de la salud sus opiniones en plataformas digitales. La Asociación de Enfermeras de Bari investiga el caso debido a las consideraciones éticamente inaceptables realizadas por la enfermera.
La Asociación de Enfermeras de Bari (AEB) inició un procedimiento disciplinario contra la enfermera. Según Saverio Andreula, presidente de la AEB, “nuestro miembro se disculpó y eliminó el post infractor”. Además, confirmó que se escuchará a la enfermera por una comisión disciplinaria, que evaluará la gravedad de sus comentarios. Las sanciones podrán ir desde una amonestación hasta la suspensión del cargo.
Consideraciones éticamente inaceptables
Andreula enfatizó que el comportamiento de la enfermera es inaceptable en el ámbito de la atención médica. “Se permitió consideraciones éticamente inaceptables sobre la elección de una pareja de padres de no reconocer al recién nacido”, declaró. Este tipo de juicios vulnera la privacidad del paciente y compromete la confianza en el sistema de salud.
El post en cuestión, que fue denunciado por un ciudadano, contenía comentarios severos que llevaron a la AEB a realizar controles internos. “La enfermera admitió que había sido torpe al publicar”, añadió Andreula, quien también señaló que la publicación de fotografías internas del hospital, sin autorización, contribuyó a la gravedad de la situación.
La enfermera defendió su acción alegando que su intención era crear conciencia sobre la situación del recién nacido, argumentando que su mensaje buscaba movilizar apoyo. Este incidente resalta la necesidad de abrir un debate más amplio sobre cómo los profesionales de la salud deben gestionar la comunicación en redes sociales.
La difusión de información sensible en casos delicados, como el de un recién nacido abandonado, pone en riesgo la confianza entre pacientes y profesionales. Los estándares éticos en la medicina son fundamentales para preservar la integridad de la atención médica. También son esenciales para proteger la confidencialidad de los pacientes en todo momento. Este caso destaca la importancia de una comunicación responsable en redes sociales en el ámbito sanitario. Las redes ofrecen oportunidades, pero también presentan riesgos significativos para la privacidad y la ética profesional.
Fuente: Il Messaggero