Estados Unidos – A partir del martes, Instagram comenzará a implementar cambios significativos en las cuentas de adolescentes. Todas las cuentas nuevas y existentes de usuarios que hayan indicado que son menores de 18 años se configurarán automáticamente como privadas. Esto significa que los titulares deberán aprobar a los nuevos seguidores antes de que puedan ver, dar me gusta o comentar en sus publicaciones. La medida es parte de la iniciativa Cuentas de adolescentes, que incluirá nuevas restricciones y ajustes para mejorar la protección de los jóvenes en la plataforma.
Instagram restringirá las notificaciones para adolescentes entre las 10 p. m. y las 7 a. m., para evitar interrupciones nocturnas. También filtrará contenido sensible, como desnudos y temas de autolesiones. Estas restricciones ya habían sido previamente anunciadas, pero se consolidan ahora en el marco de un esfuerzo más amplio por mejorar la seguridad en la red social.
Protección reforzada para adolescentes en Instagram
Otra novedad es la introducción de una función que permite a los adolescentes elegir los tipos de contenido que desean ver más, como artes o deportes. Los adolescentes de 16 y 17 años podrán hacer públicas sus cuentas y ajustar configuraciones. En cambio, los menores de 16 requerirán el permiso de sus padres para modificar la privacidad.
Instagram aplicará estos cambios a todas las nuevas cuentas esta semana. Las cuentas existentes en EE. UU., Canadá, Reino Unido y Australia se ajustarán en dos meses. Para otros países, los cambios estarán disponibles a partir de enero.
Para evitar que los adolescentes eludan estas restricciones creando cuentas falsas, Instagram implementará medidas de verificación de edad, como el envío de videos selfies para estimar la edad del usuario.
Las familias también podrán utilizar una nueva herramienta de supervisión parental. Esta permitirá a los padres configurar límites de tiempo, ver las personas con las que sus hijos han interactuado y revisar el contenido que eligen ver más. La herramienta busca dar a los padres un mayor control y visibilidad sobre la actividad de sus hijos en la plataforma.
Fuente: The New York Times